Una grabación con un sonido sólo aceptable pero que deja ver la labor matemáticamente perfecta de Gruberova, una soprano con una voz que realmente podía hacer lo que quisiese: pianissimi a lo Caballé, un fiato extensísimo, una agilidad y trinos casi perfectos, unos agudos firmísimos (aunque alcanzados con algún que otro portamento o ayudita no del todo ortodoxa)dicción clara, interpretación suficiente... vamos, perfecta o casi perfecta para el belcanto. Bonisolli no tiene nombre lo que hace. Un tenor que paralelamente cantaba Otellos desde el 1976 en Viena, que creo que fue su debut en ese papel, y cantar el Edgardo como lo canta (yo tengo otra grabación de 1980 que está igualmente impresionante) Sólo hay que escuchar con la delicadez que canta su aria final "Tu che a Dio spiegasti" o su duo con Gruberova. En YouTube hay otro duo del acto I de Lucía con Gruberova que está soberbio. Qué injusticia la cometida por la diosa Fama con este tenor.
Una grabación con un sonido sólo aceptable pero que deja ver la labor matemáticamente perfecta de Gruberova, una soprano con una voz que realmente podía hacer lo que quisiese: pianissimi a lo Caballé, un fiato extensísimo, una agilidad y trinos casi perfectos, unos agudos firmísimos (aunque alcanzados con algún que otro portamento o ayudita no del todo ortodoxa)dicción clara, interpretación suficiente... vamos, perfecta o casi perfecta para el belcanto.
ResponderEliminarBonisolli no tiene nombre lo que hace. Un tenor que paralelamente cantaba Otellos desde el 1976 en Viena, que creo que fue su debut en ese papel, y cantar el Edgardo como lo canta (yo tengo otra grabación de 1980 que está igualmente impresionante) Sólo hay que escuchar con la delicadez que canta su aria final "Tu che a Dio spiegasti" o su duo con Gruberova. En YouTube hay otro duo del acto I de Lucía con Gruberova que está soberbio.
Qué injusticia la cometida por la diosa Fama con este tenor.